Ana Tapia
Las ovejas radiactivas de Kolimá es, como la Odisea o el Cantar del Mío Cid, un poema narrativo; aunque a diferencia de los ejemplos mencionados no podemos delimitar un elemento central alrededor del cual graviten los versos, sino que se plantea antes como la cartografía de un universo amplísimo que Ana Tapia va a ir revelando, de a poco, a partir de los textos que componen el libro. Este se estructura en cinco partes: «La Tierra», «Salutri», «Menos Cuarto», «Zórvix» y «En ningún lugar, en todos los lugares». Cada una de ellas aportará un enjambre de voces que se constituirán piezas de un inmenso rompecabezas. Hacia el inicio del texto conoceremos de la existencia de una nave generacional que ha tenido que escapar de un planeta Tierra tóxico e inhabitable. Con este punto de partida, notaremos que el tono general del libro es la melancolía y que una tristeza aguda lo atraviesa de principio a fin.(Libros prohibidos)